FUENTE : LA PRENSA AUSTRAL
“La seguridad de los pasajeros del ferry Crux Australis se pone en serio riesgo, del momento que hay situaciones de extensas jornadas para el personal de la nave que son malas para las condiciones laborales de la tripulación”. Así de tajante fue la conclusión del seremi de Trabajo, Víctor Haro, tras efectuar una fiscalización sorpresa a la nave de Transbordadora Austral Broom S.A. (Tabsa), ayer, poco antes del mediodía, en la planchada del Bahía Chilota, una vez descendidos todos los viajeros que venían de Punta Arenas, entre los que se contó el mismo secretario ministerial y personeros que lo acompañaban.
La autoridad del gobierno regional se unió en el terminal marítimo fueguino, al inspector provincial del Trabajo, José Del Solar, al capitán de Puerto de Tierra del Fuego, teniente de litoral Pablo Orrego y personal local de la Armada, para iniciar una rigurosa inspección en el ferry de Tabsa poco antes del mediodía, la que se extendió por más de dos horas. En el buque tomó contacto primero, con algunos tripulantes y luego la comitiva subió al puente de mando, uniéndose al capitán del buque, Eduardo Leal, quien respondió un extenso cuestionario.
Además de las mencionadas faltas a las condiciones laborales del personal del ferry, Haro mencionó las medidas mínimas de seguridad que -dijo- “no guardan relación con las condiciones marítimas de la zona, que si bien se cumple con lo dispuesto en cuanto a la dotación mínima que exige la autoridad marítima, extendida en Valparaíso, a mi juicio esto no guarda realidad con la navegación en una zona que, sabemos, no es simple”.
“Muy por el contrario, las condiciones climáticas hacen probable enfrentar periódicamente situaciones en que las capacidades de la tripulación deben estar al cien por ciento, para afrontar una eventual emergencia. Y resulta que si no se ha descansado lo que corresponde, porque se ha estado en una jornada laboral más extensa de lo que debiera ser, sin duda no están dadas las condiciones para que se cumpla todo lo que se requiere para navegar en nuestra zona”, apuntó la autoridad laboral.
“Estamos hablando de un capitán, un solo maquinista, no hay piloto de relevo, no hay un segundo o tercer maquinista. Por lo que espero y voy a llevar esto al nivel central, para que desde el Ministerio del Trabajo se converse con el director general de Territorio Marítimo, o quien corresponda de la autoridad marítima en Valparaíso, de forma que esto se regule, atendiendo a la particular realidad de la zona, sabiendo que la navegación en alta mar acá es distinta a la del resto del país”.
Pasajeros en riesgo
Haro explicó que tomará esta medida porque cuando hay una persona que tiene responsabilidad sobre la seguridad de más de 200 pasajeros, que no tiene su capacidad (de respuesta) al 100 por ciento, “evidentemente que todos los pasajeros estamos en riesgo”. Enfatizó que tanto la seremía como la Inspección del Trabajo, están enfocados en que se regularicen las jornadas laborales, un tema que se seguirá fiscalizando, aseguró.
Respecto a la higiene y seguridad de los demás aspectos, indicó que no hubo mayores observaciones, aunque hay muchas situaciones por mejorar que va tratar con la autoridad marítima regional. Reiteró que por tratarse de una nave que transporta a cientos de pasajeros diariamente entre Porvenir y Punta Arenas, la fiscalización se hacía necesaria y la calificó de importante, por eso va a allegar los antecedentes a nivel del ministerio, a fin que no se vuelvan a ver situaciones como las descritas en la nave de Tabsa.
Al finalizar la visita inspectiva, el grupo se embarcó en la lancha “Arcángel” de la Armada, para cumplir una tarea similar a bordo de la barcaza Poseidón II, que cumple servicios de transporte para la empresa acuícola Novaustral, anclada a la gira en la bahía isleña. Más tarde, a las 14 horas (obviando un contrasentido a sus propias observaciones), el seremi del Trabajo abordó el mismo Crux Australis para retornar a la capital regional.
Certificado de dotación data de 2011
En tanto, para el capitán de Puerto fueguino, Pablo Orrego, la fiscalización conjunta con la autoridad del trabajo tenía por objeto verificar la legislación marítima y la laboral, “las cuales deben conversar”, acotó. La idea es cumplir esa tarea en las naves mayores que llegan a Porvenir, que son el ferry Crux Australis y las barcazas que traen la materia prima a Novaustral.
Orrego añadió que de acuerdo a las observaciones del seremi Haro, se hace necesario revisar el certificado de dotación mínima de seguridad emitido por la autoridad marítima en 2011 desde Valparaíso, que indica una sola persona autorizada para capitanear el buque y un jefe de máquinas. Con ello crecería la dotación de tripulantes y aumentarían sus horas de descanso, en beneficio de la seguridad de los pasajeros.
“Seremi actúa por ignorancia”
Molesto se mostró el gerente de Tabsa, Alejandro Kusanovic, al enterarse de la fiscalización sorpresiva del seremi del Trabajo al ferry Crux Australis en Porvenir. “Nosotros cumplimos con todas las leyes de la República, laborales, marítimas y de todo tipo. No nos habrían dejado zarpar si no. Así que es una ignorancia del seremi del Trabajo si éste dijo que no se cumplen las normas”, retrucó el ejecutivo naviero.
A renglón seguido, Kusanovic dijo que la seremi no tiene potestad ni facultad de efectuar una inspección a bordo del buque, porque “eso lo ve la autoridad marítima, que permanentemente nos está fiscalizando y nosotros cumplimos todas las leyes marítimas pertinentes, que son las que están operando hoy día”.
Reiteró que el seremi Haro desconoce las normas marítimas y recordó que en las elecciones pasadas, éste ya había acusado a Tabsa de no permitir que su gente bajara a votar. Los fiscalizó y después la inspección del Trabajo emitió un informe que sí se había cumplido la ley.
“Como empresa, no nos interesa vulnerar las leyes. Debe ser un problema del seremi, no sé qué intenciones tendrá. Y si dice que el ferry no cumple las normas y después se embarca para volver a Punta Arenas, ¿porqué lo hizo?. Si descubrió algo, no debió haberle permitido zarpar... quiere decir que el mismo seremi está faltando a la ley”, irónizó el ejecutivo.
“La seguridad de los pasajeros del ferry Crux Australis se pone en serio riesgo, del momento que hay situaciones de extensas jornadas para el personal de la nave que son malas para las condiciones laborales de la tripulación”. Así de tajante fue la conclusión del seremi de Trabajo, Víctor Haro, tras efectuar una fiscalización sorpresa a la nave de Transbordadora Austral Broom S.A. (Tabsa), ayer, poco antes del mediodía, en la planchada del Bahía Chilota, una vez descendidos todos los viajeros que venían de Punta Arenas, entre los que se contó el mismo secretario ministerial y personeros que lo acompañaban.
La autoridad del gobierno regional se unió en el terminal marítimo fueguino, al inspector provincial del Trabajo, José Del Solar, al capitán de Puerto de Tierra del Fuego, teniente de litoral Pablo Orrego y personal local de la Armada, para iniciar una rigurosa inspección en el ferry de Tabsa poco antes del mediodía, la que se extendió por más de dos horas. En el buque tomó contacto primero, con algunos tripulantes y luego la comitiva subió al puente de mando, uniéndose al capitán del buque, Eduardo Leal, quien respondió un extenso cuestionario.
Además de las mencionadas faltas a las condiciones laborales del personal del ferry, Haro mencionó las medidas mínimas de seguridad que -dijo- “no guardan relación con las condiciones marítimas de la zona, que si bien se cumple con lo dispuesto en cuanto a la dotación mínima que exige la autoridad marítima, extendida en Valparaíso, a mi juicio esto no guarda realidad con la navegación en una zona que, sabemos, no es simple”.
“Muy por el contrario, las condiciones climáticas hacen probable enfrentar periódicamente situaciones en que las capacidades de la tripulación deben estar al cien por ciento, para afrontar una eventual emergencia. Y resulta que si no se ha descansado lo que corresponde, porque se ha estado en una jornada laboral más extensa de lo que debiera ser, sin duda no están dadas las condiciones para que se cumpla todo lo que se requiere para navegar en nuestra zona”, apuntó la autoridad laboral.
“Estamos hablando de un capitán, un solo maquinista, no hay piloto de relevo, no hay un segundo o tercer maquinista. Por lo que espero y voy a llevar esto al nivel central, para que desde el Ministerio del Trabajo se converse con el director general de Territorio Marítimo, o quien corresponda de la autoridad marítima en Valparaíso, de forma que esto se regule, atendiendo a la particular realidad de la zona, sabiendo que la navegación en alta mar acá es distinta a la del resto del país”.
Pasajeros en riesgo
Haro explicó que tomará esta medida porque cuando hay una persona que tiene responsabilidad sobre la seguridad de más de 200 pasajeros, que no tiene su capacidad (de respuesta) al 100 por ciento, “evidentemente que todos los pasajeros estamos en riesgo”. Enfatizó que tanto la seremía como la Inspección del Trabajo, están enfocados en que se regularicen las jornadas laborales, un tema que se seguirá fiscalizando, aseguró.
Respecto a la higiene y seguridad de los demás aspectos, indicó que no hubo mayores observaciones, aunque hay muchas situaciones por mejorar que va tratar con la autoridad marítima regional. Reiteró que por tratarse de una nave que transporta a cientos de pasajeros diariamente entre Porvenir y Punta Arenas, la fiscalización se hacía necesaria y la calificó de importante, por eso va a allegar los antecedentes a nivel del ministerio, a fin que no se vuelvan a ver situaciones como las descritas en la nave de Tabsa.
Al finalizar la visita inspectiva, el grupo se embarcó en la lancha “Arcángel” de la Armada, para cumplir una tarea similar a bordo de la barcaza Poseidón II, que cumple servicios de transporte para la empresa acuícola Novaustral, anclada a la gira en la bahía isleña. Más tarde, a las 14 horas (obviando un contrasentido a sus propias observaciones), el seremi del Trabajo abordó el mismo Crux Australis para retornar a la capital regional.
Certificado de dotación data de 2011
En tanto, para el capitán de Puerto fueguino, Pablo Orrego, la fiscalización conjunta con la autoridad del trabajo tenía por objeto verificar la legislación marítima y la laboral, “las cuales deben conversar”, acotó. La idea es cumplir esa tarea en las naves mayores que llegan a Porvenir, que son el ferry Crux Australis y las barcazas que traen la materia prima a Novaustral.
Orrego añadió que de acuerdo a las observaciones del seremi Haro, se hace necesario revisar el certificado de dotación mínima de seguridad emitido por la autoridad marítima en 2011 desde Valparaíso, que indica una sola persona autorizada para capitanear el buque y un jefe de máquinas. Con ello crecería la dotación de tripulantes y aumentarían sus horas de descanso, en beneficio de la seguridad de los pasajeros.
“Seremi actúa por ignorancia”
Molesto se mostró el gerente de Tabsa, Alejandro Kusanovic, al enterarse de la fiscalización sorpresiva del seremi del Trabajo al ferry Crux Australis en Porvenir. “Nosotros cumplimos con todas las leyes de la República, laborales, marítimas y de todo tipo. No nos habrían dejado zarpar si no. Así que es una ignorancia del seremi del Trabajo si éste dijo que no se cumplen las normas”, retrucó el ejecutivo naviero.
A renglón seguido, Kusanovic dijo que la seremi no tiene potestad ni facultad de efectuar una inspección a bordo del buque, porque “eso lo ve la autoridad marítima, que permanentemente nos está fiscalizando y nosotros cumplimos todas las leyes marítimas pertinentes, que son las que están operando hoy día”.
Reiteró que el seremi Haro desconoce las normas marítimas y recordó que en las elecciones pasadas, éste ya había acusado a Tabsa de no permitir que su gente bajara a votar. Los fiscalizó y después la inspección del Trabajo emitió un informe que sí se había cumplido la ley.
“Como empresa, no nos interesa vulnerar las leyes. Debe ser un problema del seremi, no sé qué intenciones tendrá. Y si dice que el ferry no cumple las normas y después se embarca para volver a Punta Arenas, ¿porqué lo hizo?. Si descubrió algo, no debió haberle permitido zarpar... quiere decir que el mismo seremi está faltando a la ley”, irónizó el ejecutivo.
