lunes, 7 de octubre de 2013

Con 17 casos anuales la región lidera muertes de cáncer de mama

FUENTE   :   LA PRENSA AUSTRAL


Sensibilizando a la comunidad para descubrir los factores de riesgo involucrados y prevenir la aparición de la enfermedad que cobra la vida de más de mil mujeres cada año en todo Chile, la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la Universidad de Valparaíso realizó un estudio en los últimos años y descubrió que Magallanes lidera a nivel nacional la incidencia de mujeres que padecen cáncer de mama, perdiéndose en promedio más de 30 vidas anualmente.
El estudio demuestra que a nivel de regiones, la tasa de mortalidad del cáncer de mama la encabeza las regiones de Magallanes con 22 decesos por cada 100 mil mujeres, se estimarían entonces 17 decesos anuales, dado que el censo 2012 indica que en la región existen más de 75 mil mujeres. En segundo lugar de la lista se encuentra Valparaíso con 19 muertes.
La media nacional de fallecimientos por cáncer de mama es de 14 casos por cada 100 mil, por lo que tras el estudio, la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la Universidad de Valparaíso comenzó a impartir el programa “Pesquisa temprana del cáncer de mama”, para actualizar a las matronas y matrones de la red asistencial en materia de definiciones, técnicas y procedimientos diagnósticos, para que los mismos puedan realizar mejores exámenes clínicos. Este modelo podría extenderse en el resto del país.
Factores de riesgo
Las mujeres mayores de 40 años son las principales afectadas por el cáncer de mama lo que causa grandes trastornos a su vida cotidiana ya que se encuentran plenamente activas en los ámbitos familiar y laboral. Desde un punto de vista general, se estima que una de cada catorce mujeres puede llegar a desarrollar esta enfermedad en alguna etapa de su vida, por lo que la prevención y preocupación son fundamentales para detectarlo en forma oportuna.
Esta enfermedad puede, incluso, afectar a los hombres (incidencia es de 0,1 por cada cien mil) y entre los factores de riesgo asociados a esta patología se encuentran la herencia genética, la mutación (presente en el quince por ciento de los casos), estilo de vida poco saludable (sedentarismo, tabaquismo, alcoholismo), el estilo de vida durante la maternidad y la edad.
Los especialistas señalan que la única estrategia que ha sido demostrada como útil en el diagnóstico precoz de este cáncer, es la realización anual de la mamografía a partir de los 40 años, ya que su detección temprana determinará una mayor sobrevida con una mejor calidad de vida, tratamientos menos complejos.