FUENTE : LA PRENSA AUSTRAL
Categóricos fueron los dichos del presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas filial Punta Arenas, Claudio Alvaradejo, respecto del complejo escenario laboral que enfrenta un funcionario vinculado a una investigación de tráfico de drogas, luego de que la Fiscalía desestimara su participación en una “banda de narcotraficantes” desbaratada en 2012 en Ultima Esperanza. Pese a lo anterior, hoy Fernando Padilla Pacheco está a las puertas de ser exonerado como resultado de un sumario administrativo iniciado por su servicio.
“La asociación es contraria a toda acción u omisión que puedan cometer nuestros funcionarios en relación a la Ley de Drogas o a cualquier normativa que a nosotros nos toca regular. Sin embargo, en este caso en particular, a nuestro juicio, siempre hubo malestar, ya que siempre sostuvimos que no hubo antecedentes necesarios ni siquiera para formalizar al funcionario”, planteó el dirigente gremial.
Alvaradejo agregó que “la manera de cómo fue detenido lapidó el prestigio del afectado y del servicio, en circunstancias que transcurrido el tiempo la misma justicia determinó que no habían mayores pruebas para inculpar al colega. Consideramos que hubo un daño, no sólo personal, sino que además a todos los funcionarios de la institución”.
Manifestó lo anterior en virtud de la entrevista que el funcionario aduanero, Fernando Padilla, concediera el fin de semana a El Magallanes,
En ésta, el empleado público se refirió a los cargos judiciales comunicados en mayo de 2012, como supuesto miembro de una banda destinada al tráfico de droga, que internaba marihuana a territorio chileno desde Argentina. La causa respecto de Padilla fue sobreseída luego de que la Fiscalía de Puerto Natales determinara no perseverar en su contra, no así de los otros cuatro involucrados quienes terminaron siendo condenados.
“Creo que no fue un trabajo prolijo de la policía. Mucha parafernalia y poco resultado en el caso de nuestro colega, no así en cuanto a los que sí eran culpables. No compartimos ni la forma ni los procedimientos, y el resultado en definitiva nos dio la razón. Creo que de ahí se debe aprender cómo entregar una noticia, sobre todo cuando hay funcionarios públicos involucrados, y más aún cuando es uno de los que nos toca luchar contra el flagelo de la droga, lo digo con mucha fuerza: debe aprenderse la lección de aquello”, recalcó Alvaradejo.
Añadió que al Servicio Nacional de Aduanas le faltó establecer definitivamente la posición de la institución sobre esta detención.
“Es una crítica que le hago a mi servicio. Faltó una voz oficial de Aduanas que dijera enérgicamente que Fernando nunca tuvo relación alguna con el trafico de la droga. Por el contrario, se guardó un silencio que a nuestra asociación molestó. Al menos creemos que se debió haber emitido un comunicado para limpiar, no solamente el prestigio del funcionario, sino también el prestigio del mismo servicio”, puntualizó.
Responsabilidad policial
El representante gremial de los trabajadores de Aduanas apuntó sus dardos en contra de la Brigada Antinarcóticos de la PDI, por la condena mediática de la que fue víctima su asociado.
“Es la forma cómo se hace. La PDI tuvo todos los antecedentes sobre la mesa y no más de los que se entregaron para inculpar a nuestro funcionario. El lenguaje que utilizó la policía a nuestro juicio no fue el adecuado; lo involucró en una situación en la que la justicia todavía no había dado el resultado final como el que conocemos: libre”.
El dirigente comentó que cuando se habla de “banda de traficantes” y se involucra a su funcionario, “eso fue lo que nos molestó”. En su opinión se pudo haber utilizado un lenguaje distinto, sabiendo que habían sensibilidades muy especiales. “La parafernalia que se utilizó es lo que molesta. Si el funcionario hubiese estado involucrado no hay nada más que hablar, pero no lo estaba. Por eso reclamamos el trato especial, ya que la policía nunca saca una comunicación admitiendo que se cometió una equivocación”, remarcó.
Proceso administrativo
Asegura que al interior del Servicio Nacional de Aduanas se hicieron llegar todos los reclamos pertinentes una vez terminada la causa en contra de Padilla.
“Me parece que ahí debió prevalecer una obligación estatutaria que llama al servicio a haber actuado y no se hizo. Se lo hice presente al director regional de la época e incluso al director nacional en alguna de las visitas que hizo a nuestra región”, subrayó Alvaradejo.
Respecto del sumario administrativo abierto en contra del funcionario, el directivo se mostró cauto e indicó que el resultado de dicho procedimiento no está concluido.
“En cuanto a la causa de la justicia ordinaria quedó establecido que el colega no tuvo nunca nada que ver; pero respecto del proceso administrativo el caso es distinto. Si él, dentro de sus acciones u omisiones infringió alguna norma administrativa sancionada por el estatuto, todavía existe un sumario en el que está haciendo uso de todos los caminos que le entrega la propia norma para hacer su defensa. Debo decir que como gremio nuestro interés es que se agoten todas las instancias legales administrativas para su defensa, y eso es un tema no acabado por lo que no podemos dar una opinión. Pero debo señalar que a mi juicio ahí hubo faltas que tienen que ser sancionadas definitivamente, la sanción no la da el gremio, la sanción la da el servicio y es eso lo que estamos esperando: el resultado final de la causa”, concluyó.
Categóricos fueron los dichos del presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas filial Punta Arenas, Claudio Alvaradejo, respecto del complejo escenario laboral que enfrenta un funcionario vinculado a una investigación de tráfico de drogas, luego de que la Fiscalía desestimara su participación en una “banda de narcotraficantes” desbaratada en 2012 en Ultima Esperanza. Pese a lo anterior, hoy Fernando Padilla Pacheco está a las puertas de ser exonerado como resultado de un sumario administrativo iniciado por su servicio.
“La asociación es contraria a toda acción u omisión que puedan cometer nuestros funcionarios en relación a la Ley de Drogas o a cualquier normativa que a nosotros nos toca regular. Sin embargo, en este caso en particular, a nuestro juicio, siempre hubo malestar, ya que siempre sostuvimos que no hubo antecedentes necesarios ni siquiera para formalizar al funcionario”, planteó el dirigente gremial.
Alvaradejo agregó que “la manera de cómo fue detenido lapidó el prestigio del afectado y del servicio, en circunstancias que transcurrido el tiempo la misma justicia determinó que no habían mayores pruebas para inculpar al colega. Consideramos que hubo un daño, no sólo personal, sino que además a todos los funcionarios de la institución”.
Manifestó lo anterior en virtud de la entrevista que el funcionario aduanero, Fernando Padilla, concediera el fin de semana a El Magallanes,
En ésta, el empleado público se refirió a los cargos judiciales comunicados en mayo de 2012, como supuesto miembro de una banda destinada al tráfico de droga, que internaba marihuana a territorio chileno desde Argentina. La causa respecto de Padilla fue sobreseída luego de que la Fiscalía de Puerto Natales determinara no perseverar en su contra, no así de los otros cuatro involucrados quienes terminaron siendo condenados.
“Creo que no fue un trabajo prolijo de la policía. Mucha parafernalia y poco resultado en el caso de nuestro colega, no así en cuanto a los que sí eran culpables. No compartimos ni la forma ni los procedimientos, y el resultado en definitiva nos dio la razón. Creo que de ahí se debe aprender cómo entregar una noticia, sobre todo cuando hay funcionarios públicos involucrados, y más aún cuando es uno de los que nos toca luchar contra el flagelo de la droga, lo digo con mucha fuerza: debe aprenderse la lección de aquello”, recalcó Alvaradejo.
Añadió que al Servicio Nacional de Aduanas le faltó establecer definitivamente la posición de la institución sobre esta detención.
“Es una crítica que le hago a mi servicio. Faltó una voz oficial de Aduanas que dijera enérgicamente que Fernando nunca tuvo relación alguna con el trafico de la droga. Por el contrario, se guardó un silencio que a nuestra asociación molestó. Al menos creemos que se debió haber emitido un comunicado para limpiar, no solamente el prestigio del funcionario, sino también el prestigio del mismo servicio”, puntualizó.
Responsabilidad policial
El representante gremial de los trabajadores de Aduanas apuntó sus dardos en contra de la Brigada Antinarcóticos de la PDI, por la condena mediática de la que fue víctima su asociado.
“Es la forma cómo se hace. La PDI tuvo todos los antecedentes sobre la mesa y no más de los que se entregaron para inculpar a nuestro funcionario. El lenguaje que utilizó la policía a nuestro juicio no fue el adecuado; lo involucró en una situación en la que la justicia todavía no había dado el resultado final como el que conocemos: libre”.
El dirigente comentó que cuando se habla de “banda de traficantes” y se involucra a su funcionario, “eso fue lo que nos molestó”. En su opinión se pudo haber utilizado un lenguaje distinto, sabiendo que habían sensibilidades muy especiales. “La parafernalia que se utilizó es lo que molesta. Si el funcionario hubiese estado involucrado no hay nada más que hablar, pero no lo estaba. Por eso reclamamos el trato especial, ya que la policía nunca saca una comunicación admitiendo que se cometió una equivocación”, remarcó.
Proceso administrativo
Asegura que al interior del Servicio Nacional de Aduanas se hicieron llegar todos los reclamos pertinentes una vez terminada la causa en contra de Padilla.
“Me parece que ahí debió prevalecer una obligación estatutaria que llama al servicio a haber actuado y no se hizo. Se lo hice presente al director regional de la época e incluso al director nacional en alguna de las visitas que hizo a nuestra región”, subrayó Alvaradejo.
Respecto del sumario administrativo abierto en contra del funcionario, el directivo se mostró cauto e indicó que el resultado de dicho procedimiento no está concluido.
“En cuanto a la causa de la justicia ordinaria quedó establecido que el colega no tuvo nunca nada que ver; pero respecto del proceso administrativo el caso es distinto. Si él, dentro de sus acciones u omisiones infringió alguna norma administrativa sancionada por el estatuto, todavía existe un sumario en el que está haciendo uso de todos los caminos que le entrega la propia norma para hacer su defensa. Debo decir que como gremio nuestro interés es que se agoten todas las instancias legales administrativas para su defensa, y eso es un tema no acabado por lo que no podemos dar una opinión. Pero debo señalar que a mi juicio ahí hubo faltas que tienen que ser sancionadas definitivamente, la sanción no la da el gremio, la sanción la da el servicio y es eso lo que estamos esperando: el resultado final de la causa”, concluyó.
