miércoles, 10 de abril de 2013

Alto precio de cigarrillos chilenos desata contrabando desde Argentina

Alto precio de cigarrillos chilenos desata contrabando desde Argentina
Hasta el 15 de marzo el Servicio de Aduanas registraba la incautación de 6.200 cajetillas, en diferentes procedimientos. Más la PDI que hace poco desbarató un clandestino en Puerto Natales.
Últimamente los comerciantes han experimentado una fuerte caída en la venta de cigarrillos chilenos, pero no precisamente por la entrada en vigencia de la nueva Ley de Tabaco, sino por la masiva venta de cigarrillos argentinos.
La diferencia de precio es abismante y frente a eso los dueños de kioscos, almacenes y comercio en general nada pueden hacer. Más encima esta semana los Belmont volvieron a subir de precio quedando en $ 2.400 los de caja y $ 2.200 los de envoltorio blando. Estos valores compiten con los $ 1.000 o $ 1.200 que cuesta un Belmont argentino en Punta Arenas.
“El Lucky mentolado argentino lo encuentras a $ 1.200 y el chileno lo tenemos que vender a $ 2.500. Frente a eso la gente lo primero que nos pregunta es si vendemos cigarros argentinos. Como les digo que no, se dan media vuelta y antes de marcharse me dicen: en mi barrio sí venden”, nos comenta la señora Rosa, dueña de un céntrico y tradicional kiosco de Punta Arenas.
Si la tabacalera chilena piensa que en Magallanes la gente dejó de fumar por la nueva ley, está equivocada. Lo más probable es que echen la misma cantidad de humo, pero con cigarrillos traídos del otro lado de la frontera.
Contrabando
Por eso cada vez se hace más frecuente ver o escuchar noticias de Aduana, PDI o Carabineros sobre contrabando.
Hace poco la Prefectura Última Esperanza de la Policía de Investigaciones informó de la incautación de miles de cajetillas de cigarrillos argentinos, avaluadas en más de 25 millones de pesos. En un domicilio particular descubrieron el acopio de cartones de cigarrillos. Los mismos eran ingresados a Chile por un paso fronterizo no habilitado para ser comercializados, presumiblemente en la ciudad de Punta Arenas.
Para el jefe de fiscalizaciones Aduana Punta Arenas, Roberto Cárdenas, el cigarrillo que se trae de Argentina es algo histórico, no es algo nuevo, “lo que pasa es que hoy, los precios que alcanzan los cigarrillos en Chile, hacen más conveniente comprarlo en Argentina y eso provoca una demanda muy interesante de parte de los consumidores, porque entiendo que el precio es bastante bajo, yo no soy fumador, y eso desata el interés de comercializar cigarrillos en Chile”.
Sin embargo, aclara, los cigarros están afectos a tributos importantes en nuestro país, como también al visto bueno de Salud. “Es ahí donde nosotros ejercemos nuestros controles debido al aumento que registra la traída de cigarrillos desde el otro lado de la frontera”.
Cárdenas manifiesta que los puntos de entrada son variados, tanto por San Sebastián en Tierra del Fuego, como Dorotea y Casa Viejas en Última Esperanza; y Monte Aymond en Magallanes.
De acuerdo a la experiencia aduanera, cuando la gente accede por los pasos fronterizos habilitados, generalmente oculta en sus vehículos, en un doble fondo, los cigarros.
Y si no hacen uso de la franquicia legal que tienen los viajeros, que permite a cada persona adulta traer dos cartones de cigarrillos. En el caso de Puerto Natales, la cercanía con Argentina hace que las personas viajen hasta dos o tres veces al día a Río Turbio.
El delito en sí está tipificado como contrabando y Aduana le aplica una multa al infractor, que puede llegar a una vez el valor de la mercancía, las que se valoran de acuerdo a la normativa que tiene Aduana. “Si la persona no se allana a esta posibilidad, que es como una salida alternativa, el servicio actúa como víctima y puede presentar una querella criminal en tribunales”, explica Cárdenas.
En lo que va corrido del presente año, hasta el 15 de marzo, el Servicio de Aduanas registraba 10 procedimientos por contrabando (según detalle del cuadro adjunto), con incautaciones que llegan a los 620 cartones.
Sin contar el procedimiento de hace pocos días de la Policía de Investigaciones en Puerto Natales.



FUENTE    : EL PINGUINO