viernes, 8 de noviembre de 2013

Madre de femicida: “Mi hijo tiene que pagar por su crimen y sólo espero que la justicia no sea tan dura con él”

FUENTE  :  LA PRENDA AUSTRAL



Impacto nacional ha provocado el caso de femicidio que costó la vida de Ruth Velásquez Vargas, de 33 años, madre de dos hijos, quien luego de estar 8 días desaparecida, su esposo, Héctor Briones Gatica, confesó haberla asesinado y enterrado su cuerpo en el vertedero municipal.
Fue su madre, Rosa Gatica Reyes, quien persuadió a su hijo para que se entregara y confesara su crimen. Y para ello el martes lo acompañó a la Fiscalía de Punta Arenas.
“Viajé en cuanto pude, cuando me enteré que estaba desaparecida (...) mi hijo siempre me decía que quería recuperar la relación, que no estaba bien con ella, pero él la amaba con todo su corazón y no me logró explicar qué pasó por su cabeza para hacer lo que hizo”, señaló Rosa Gatica, madre del femicida, en conversación con La Prensa Austral.
La mujer llegó el lunes 4 de noviembre a Punta Arenas desde Santiago, para cuidar a sus nietos y colaborar en la búsqueda de su nuera, quien había sido reportada como desaparecida el lunes 28 de octubre.
- ¿Su hijo nació en la comuna de San Miguel?
- “Sí, es el mayor de tres hijos, y siempre fue muy bueno y se preocupaba de sus hermanos cuando nosotros (padres) teníamos que ir a trabajar”.
-¿Cuándo llega a Punta Arenas?
- “Nos vinimos en 1998, ya que mi marido era comerciante y pasaba más tiempo acá que en la casa. A veces se venía por 6 meses, así que nos vinimos por un tiempo y después mandé a buscar a mis tres hijos a Santiago, a Héctor, Claudio y Cristopher”.
- ¿Héctor alguna vez fue violento?
- “Jamás, él era muy cariñoso y amable, cuidaba a sus hermanos, los llevaba al colegio y después se iba a estudiar al liceo. Era muy trabajador y con su familia siempre trató de entregarles todo lo que ganaba”.
- ¿Hubo actos de violencia intrafamiliar entre ustedes?
- “Nunca, jamás hubo agresiones ni entre nosotros o contra de los niños, él no se crió en ese ambiente, desde muy pequeños les enseñé a mis hijos que hombre que le pega a una mujer es un maricón”.
- ¿Cuándo supo que Ruth estaba desaparecida?
- “Una sobrina me avisó que vio por Internet que ‘la chica’ como le decía de cariño a Ruth, estaba perdida; eso fue el jueves así que llamé al Leo (Héctor Leonardo) y le pregunté qué estaba pasando. Me contó que ella había desaparecido y que la estaban buscando, así que compré el primer pasaje que encontré para venir a cuidar a mis nietos y poder apoyar a la familia de ella”.
- ¿Cuándo llegó a Punta Arenas?
- “La madrugada de este lunes, fue lo único (pasaje) que encontré para viajar pronto”.
- ¿Sospechaba algo antes de llegar?
- “Nunca se me pasó esto por la cabeza. El Leo amaba con todo su corazón a Ruth, me consta que estaba sufriendo porque la relación no estaba bien, y me decía que se la iba a jugar todo para salvar su matrimonio”.
- ¿Cuándo empezó a darse cuenta de todo?
- “Nunca lo pensé hasta que me lo confesó. Antes me había hecho preguntas de que si lo perdonaría, o si cuidaría a los niños si algo le pasaba, pero fue sólo hasta el martes que me contó todo”.
- ¿Qué recuerda de esa conversación?
- “Le pregunté si tenía algo que ver y me contestó que sí, que él lo había hecho, que se pusieron a discutir y que fue un arrebato, que nunca pensó en hacerle daño. Me dijo que cuando se dio cuenta empezó a moverla para despertarla y se dio cuenta de lo que había hecho”.
- ¿Supo que existieran episodios de violencia de parte de su hijo hacia Ruth?
- “Nunca supe que hubiese violencia, ni con Ruth ni menos con los niños, él los amaba y siempre se portó correcto con sus hijos”.
- ¿Por qué le dijo que se entregara?
- “Cuando empezamos a conversar, nos sentamos en el sillón grande, me abrazó y me confesó todo. Me señaló que se quería entregar, aunque primero dijo que quería irse y le aconsejé que no lo hiciera, diciéndole que se entregara y que había que darle cristiana sepultura a la madre de sus hijos. Me pidió que esperáramos un día para disfrutar una última noche con los niños, pero enseguida le respondí que no: ‘Leito, no esperemos más’, aguardamos que llegara el niño del colegio y nos fuimos”.
En este momento de la entrevista, la mujer no pudo contener las lágrimas, rompiendo en llanto al recordar la última conversación con su hijo, el cual describe como “el momento más duro que ha vivido”.
- ¿Qué sintió en ese instante?
- “Me sentí morir, nunca pensé que Leo hiciera eso, fue siempre un excelente hombre no tengo nada que decir de él”.
- ¿Ha podido hablar con él después de que fuera enviado a la cárcel?
- “Hoy (ayer) conversé con él, está más tranquilo después de haberse desahogado. Está muy preocupado por los niños y por la familia de Ruth, por su suegra y por mí”.
- ¿Qué más le comentó?
- “Que está muy preocupado por los niños, y que quiere trabajar para poder entregarles dinero y que no les falte nada”.
- ¿Los hijos saben lo que pasó?
- “Saben que su mamá falleció, y Leo le dijo que se iría a trabajar fuera de la ciudad como antes lo había hecho”.
- ¿Está arrepentido su hijo?
- “Mucho, pidió perdón a la familia de Ruth y me pidió perdón a mí”.
- ¿Y usted lo perdona?
- “Claro que lo perdono, porque yo sé que la amaba, lo perdono de todo corazón como madre que soy. No justifico para nada lo que hizo, sé que fue malo que le diera muerte a su esposa y que tiene que pagar por lo que hizo, pero tiene mi perdón”.
- ¿Qué espera ahora de la justicia?
- “Leo tiene que pagar por lo que hizo, sólo espero que la justicia no sea tan dura con él y que no le den tantos años”.
Velatorio de Ruth
Especial entereza ha mostrado la mujer ya que ha dado la cara por su hijo asistiendo al velatorio de su nuera, aunque reconoce que fundamental ha sido el respaldo que la propia familia de Ruth le ha brindado. “Ellos no me han dado la espalda, se han portado muy bien conmigo, existe un lazo muy estrecho y he sentido mucho el apoyo de toda la familia, inclusive le pregunté a la mamá si podía recibir a mi esposo y me dijo ‘usted sabe que esta es su casa’”.
A lo anterior se suman los dichos que Lorena Velásquez, hermana de la fallecida madre de 33 años. “Somos madres, tratamos de entender lo que ella está pasando y en este momento ella es una más de nosotras, también está sufriendo y sabemos que no tiene nada que ver con lo que hizo su hijo. Esperamos que comprenda que nosotros pediremos las penas más duras para que se haga justicia por la muerte de mi hermana”, sentenció.
Finalmente, la familia de la víctima de este femicidio formuló un llamado a la comunidad a participar del funeral, el cual se iniciará hoy a las 14,30 horas cuando el cortejo fúnebre saldrá de la sede deportiva donde está llevándose a cabo el velatorio. El cortejo fúnebre hará un alto frente al supermercado Unimarc de Avenida Allende para que los restos de la malograda cajera sean despedidos por sus compañeros de trabajo.
“Invitamos a todos los que quieran despedir a Ruth a que no vayan de luto, no queremos ver el negro en su funeral, ella toda su vida fue una mujer muy alegre y nos gustaría que la despidiéramos con colores vivos y globos, para recordarla con la alegría que siempre tuvo”, concluyó Lorena Velásquez.

Femicida debió ser atendido en el Hospital Clínico

Cerca de las 13 horas de ayer, Héctor Briones Gatica, autor confeso del asesinato de Ruth Velásquez Vargas, preso en la cárcel local luego de ser formalizado por el delito de femicidio el pasado miércoles, debió ser trasladado por Gendarmería al Servicio de Urgencias del Hospital Clínico. Una descompensación y evidente afectación emocional detonaron que personal encargado de su custodia determinara trasladarlo al recinto médico a objeto de que fuera sometido a evaluación médico. Trascendió que si bien se le ha visto más tranquilo, estaría experimentando un fuerte cuadro depresivo, lo que provocó la crisis que requirió su traslado al recinto médico bajo un fuerte dispositivo de seguridad, a cargo de siete gendarmes armados. Tras recibir atención especializada fue devuelto al complejo penitenciario.