FUENTE : LA PRENSA AUSTRAL
Un saldo de 8 personas damnificadas, cuatro bomberos lesionados y daños materiales cuantiosos, dejó un devastador incendio que movilizó a una dotación de 80 voluntarios de seis compañías del Cuerpo de Bomberos hasta la población José de los Santos Mardones pasado el mediodía de ayer. El drama se desencadenó en la ribera norte del río de las Minas, a unos 500 metros al poniente de la Avenida Eduardo Frei.
Si bien el incendio declarado cerca de las 12,25 horas afectó a dos propiedades, lo cierto es que fueron siete los hogares destruidos por las llamas, ya que en uno de los terrenos habían varios departamentos pequeños los cuales resultaron comprometidos.
“Se trata de un incendio multicompartimental propagándose a otras viviendas. Requerimos más unidades urgente al lugar”. Esa fue la información que entregaron los primeros voluntarios del Cuerpo de Bomberos que llegaron hasta las inmediaciones del pasaje Paicaví y calle Francisco Pizarro.
El fuego, que se inició en la parte posterior del domicilio de Paicaví Nº632, rápidamente comenzó a propagarse a las construcciones de material ligero circundantes.
Desde el primer inmueble afectado, las llamas avanzaron hacia la casa signada con el Nº01217 de calle Francisco Pizarro, propiedad de Gloria Saldivia Ojeda, la que con el esfuerzo de los años había construido pequeñas dependencias en el patio para su arrendamiento.
“Me quedé sin nada. Todo se destruyó en cuestión de minutos. Menos mal que esto no fue de noche, sino quizás qué hubiese pasado”, relató la afectada a La Prensa Austral.
Arduos fueron los esfuerzos de los cerca de 80 voluntarios de seis compañías de Bomberos que acudieron a la emergencia. La institución debió movilizar nueve carros para contener el siniestro que amenazaba con consumir completamente la manzana donde estaban situadas las propiedades afectadas.
En su labor, cuatro bomberos de la 2ª, 4ª, 7ª y 8ª compañías resultaron lesionados, por lo que debieron ser trasladados por personal del Samu al Hospital de las Fuerzas Armadas, donde se les constataron heridas de mediana gravedad.
Cuantiosas pérdidas
Luego de casi 45 minutos de lucha contra el fuego y controlada la situación, quedó en evidencia la destrucción que las llamas dejaron a su paso. En total, siete hogares resultaron completamente devastados, además de otras dos viviendas afectadas y 8 personas damnificadas.
Uno de los más comprometidos fue el esquilador Moisés Ñancul Ñancul de 45 años, cuya vivienda -una de las casas donde se habría iniciado el incendio- resultó completamente destruida. Perdió todo, inclusive una de sus mascotas: una perra que murió calcinada.
“Perdí todos los años de trabajo. Mi motosierra quedó destruida; mi ropa, mi cama, todo. Quedé con lo puesto”, dijo visiblemente conmovido el trabajador de campo, quien por su oficio pasa la mayor parte del tiempo fuera de la ciudad.
Asimismo, Oscar Castro Millán, otro vecino que reside más de 10 años en el sector, también resultó damnificado luego que su vivienda fuera arrasada por el fuego. Esta casa fue el primer inmueble afectado tras el inicio del fuego, el que aparentemente habría comenzado en el hogar colindante desde donde se habría propagado también al pequeño condominio.
Ambos trabajadores hicieron un llamado a quienes puedan colaborar con la reconstrucción de sus hogares, a contactarse a los teléfonos 93676172 en el caso de Ñancul, o al 62014124 con Oscar Castro.
Múltiples hogares
Cuatro pequeños departamentos tenía edificados en su propiedad Gloria Saldivia Ojeda, además de su casa principal, la que compartía con sus nietas que la iban a acompañar en forma habitual.
“Siempre estaba pendiente de mis arrendatarios y ahora estaba postulando a un proyecto para poder mejorar todo. Pero mire, el fuego echó todo abajo”, dijo tristemente la mujer.
“Tendré que levantarlo todo de nuevo. Sé que podré hacerlo, y doy gracias que no le pasó nada a nadie”, concluyó la damnificada a quien puede contactársele en el número 58415451 para canalizar la ayuda para ella o sus inquilinos, en total 7 adultos.
Causa del fuego
Los peritos del Departamento de Investigación de Incendios de Bomberos trabajaron hasta cerca de las 20,30 horas de ayer para dar con el origen del siniestro. Transcendió que la zona focal estaría ubicada en la vivienda del esquilador, aparentemente en una estufa artesanal.
Además, cabe señalar que en el sitio de la emergencia, el comandante a cargo, Eduardo Bahamonde, manifestó que fue particularmente compleja la situación debido al viento que hubo a la hora del incendio; y a la baja presión de agua existente en los grifos del sector.
Al lugar también acudió el intendente Claudio Radonich, quien señaló que “nos acercamos a la emergencia en virtud de que la gente del municipio, que es la que normalmente canaliza la ayuda para los afectados en esta situación, permanecen en paro, por lo que he solicitado que la asistente social de la intendencia pueda gestionar la ayuda que podamos entregar a los vecinos que perdieron todo”.
Un saldo de 8 personas damnificadas, cuatro bomberos lesionados y daños materiales cuantiosos, dejó un devastador incendio que movilizó a una dotación de 80 voluntarios de seis compañías del Cuerpo de Bomberos hasta la población José de los Santos Mardones pasado el mediodía de ayer. El drama se desencadenó en la ribera norte del río de las Minas, a unos 500 metros al poniente de la Avenida Eduardo Frei.
Si bien el incendio declarado cerca de las 12,25 horas afectó a dos propiedades, lo cierto es que fueron siete los hogares destruidos por las llamas, ya que en uno de los terrenos habían varios departamentos pequeños los cuales resultaron comprometidos.
“Se trata de un incendio multicompartimental propagándose a otras viviendas. Requerimos más unidades urgente al lugar”. Esa fue la información que entregaron los primeros voluntarios del Cuerpo de Bomberos que llegaron hasta las inmediaciones del pasaje Paicaví y calle Francisco Pizarro.
El fuego, que se inició en la parte posterior del domicilio de Paicaví Nº632, rápidamente comenzó a propagarse a las construcciones de material ligero circundantes.
Desde el primer inmueble afectado, las llamas avanzaron hacia la casa signada con el Nº01217 de calle Francisco Pizarro, propiedad de Gloria Saldivia Ojeda, la que con el esfuerzo de los años había construido pequeñas dependencias en el patio para su arrendamiento.
“Me quedé sin nada. Todo se destruyó en cuestión de minutos. Menos mal que esto no fue de noche, sino quizás qué hubiese pasado”, relató la afectada a La Prensa Austral.
Arduos fueron los esfuerzos de los cerca de 80 voluntarios de seis compañías de Bomberos que acudieron a la emergencia. La institución debió movilizar nueve carros para contener el siniestro que amenazaba con consumir completamente la manzana donde estaban situadas las propiedades afectadas.
En su labor, cuatro bomberos de la 2ª, 4ª, 7ª y 8ª compañías resultaron lesionados, por lo que debieron ser trasladados por personal del Samu al Hospital de las Fuerzas Armadas, donde se les constataron heridas de mediana gravedad.
Cuantiosas pérdidas
Luego de casi 45 minutos de lucha contra el fuego y controlada la situación, quedó en evidencia la destrucción que las llamas dejaron a su paso. En total, siete hogares resultaron completamente devastados, además de otras dos viviendas afectadas y 8 personas damnificadas.
Uno de los más comprometidos fue el esquilador Moisés Ñancul Ñancul de 45 años, cuya vivienda -una de las casas donde se habría iniciado el incendio- resultó completamente destruida. Perdió todo, inclusive una de sus mascotas: una perra que murió calcinada.
“Perdí todos los años de trabajo. Mi motosierra quedó destruida; mi ropa, mi cama, todo. Quedé con lo puesto”, dijo visiblemente conmovido el trabajador de campo, quien por su oficio pasa la mayor parte del tiempo fuera de la ciudad.
Asimismo, Oscar Castro Millán, otro vecino que reside más de 10 años en el sector, también resultó damnificado luego que su vivienda fuera arrasada por el fuego. Esta casa fue el primer inmueble afectado tras el inicio del fuego, el que aparentemente habría comenzado en el hogar colindante desde donde se habría propagado también al pequeño condominio.
Ambos trabajadores hicieron un llamado a quienes puedan colaborar con la reconstrucción de sus hogares, a contactarse a los teléfonos 93676172 en el caso de Ñancul, o al 62014124 con Oscar Castro.
Múltiples hogares
Cuatro pequeños departamentos tenía edificados en su propiedad Gloria Saldivia Ojeda, además de su casa principal, la que compartía con sus nietas que la iban a acompañar en forma habitual.
“Siempre estaba pendiente de mis arrendatarios y ahora estaba postulando a un proyecto para poder mejorar todo. Pero mire, el fuego echó todo abajo”, dijo tristemente la mujer.
“Tendré que levantarlo todo de nuevo. Sé que podré hacerlo, y doy gracias que no le pasó nada a nadie”, concluyó la damnificada a quien puede contactársele en el número 58415451 para canalizar la ayuda para ella o sus inquilinos, en total 7 adultos.
Causa del fuego
Los peritos del Departamento de Investigación de Incendios de Bomberos trabajaron hasta cerca de las 20,30 horas de ayer para dar con el origen del siniestro. Transcendió que la zona focal estaría ubicada en la vivienda del esquilador, aparentemente en una estufa artesanal.
Además, cabe señalar que en el sitio de la emergencia, el comandante a cargo, Eduardo Bahamonde, manifestó que fue particularmente compleja la situación debido al viento que hubo a la hora del incendio; y a la baja presión de agua existente en los grifos del sector.
Al lugar también acudió el intendente Claudio Radonich, quien señaló que “nos acercamos a la emergencia en virtud de que la gente del municipio, que es la que normalmente canaliza la ayuda para los afectados en esta situación, permanecen en paro, por lo que he solicitado que la asistente social de la intendencia pueda gestionar la ayuda que podamos entregar a los vecinos que perdieron todo”.
